Este no era el blog que tenia pensado hacer, pero creo que el tema que hablaré podría interesar tanto a aspergers como a neurotipicos. Es algo por lo que seguro muchos han pasado y quiero dar mi punto de vista como asperger.
Hace una semana pasó algo muy interesante: tenía dos amigos cuyos nombres no mencionaré aquí pero llamémosles Laura y Joaquín. Bueno, Laura y Joaquín eran mis amigos por Internet desde hace como un año (bueno, Laura es mi amiga hace un año y medio y Joaquín como 3/4 de año) y ellos dos se llevaban muy bien. Entonces un día Joaquín le dijo a Laura que le gustaba y que quería que fueran novios. Y así fue, por un mes hasta que Laura rompió con el porque no podía llevar una relación a distancia.
No es tan terrible, millones de personas en el mundo tienen relaciones a distancia y son felices, incluso yo he tenido así que no tengo por que criticarlos ni nada. De hecho, ni siquiera es el punto de este blog. El caso: Laura y Joaquín decidieron no dejar de ser amigos. Pero Joaquín no quería rendirse y siguió buscando una oportunidad para volver con ella, aún cuando ella le decía que no en más de una ocasión. Bueno, en una ocasión Joaquín me escribió emocionado, porque Laura le dio un mensaje que el interpretó como que era una señal de que podrían volver. Yo me quedé sorprendido y le fui a preguntar a Laura, a lo que ella me dijo:
"Se emociona demasiado, nunca dije que fuéramos a volver"
Para mi esa respuesta fue como: "no me sorprende". Verán, Joaquín me contaba todas sus decepciones amorosas con Laura y como deseaba que volvieran, etc. Mientras que Laura me contaba como ella no había terminado de descartar a Joaquín, pero no quería nada hasta no verse en la vida real. Suena lógico, ¿no? Si todas las parejas online pudieran verse en persona, seguro lo harían.
Pero bueno, el tiempo pasó y Joaquín se seguía decepcionado cada vez que Laura volvía a fallar en sus expectativas de seguir siendo novios, pero seguía insistiendo. Hasta que un día decidí decirle de una vez:
"Viejo, ella no te ama. Superalo."
El se negó a creerme hasta que le mostré la captura de Laura diciendo que se emocionaba mucho. Y... bueno... lo que pasó después no podría haberlo predicho: Joaquín se tomó la frase "emocionado" como un insulto personal, que según el que lo llamen emocionado a la persona que se ha preocupado y la ha ayudado en todo momento era el colmo y que no iba a perdonar eso. Entonces bloqueó a Laura de todos lados. Ella se sintió mal, y le expliqué todo lo que pasó y que le mostré la captura y que por mi culpa el ya no quería seguir siendo su amigo. Realmente me sentí culpable. Moví cielo, mar y tierra para que Joaquín le diera otra oportunidad a Laura para aclarar las cosas... Así que cuando finalmente lo logre y vi que ahora Laura era quien no quería seguir siendo su amiga me quedé como:
...........¡¡¿¿PERO QUÉ MIE-
Y así Laura y Joaquín, una mejor amistad de casi 2 años se transformó en una enemistad donde ninguno de los dos tolera siquiera verse. Y siendo sincero: Me alegro en parte. Luego de que le preguntara a Laura que pasó, me explicó que Joaquín le insistía tan seguido que parecía que solo la quería como novia y nunca le importó como amiga.
Y entonces, reflexionando me di cuenta de lo muy delicadas que son las relaciones entre las personas.
Veámoslo así: tenemos un sube y baja.
Cada lado es cuando alguien te cae bien o mal, y en el centro esta la neutralidad. Osea, cuando esa persona no te cae ni bien ni mal. En el extremo "bueno" tenemos:
"me cae bien"
"me cae muy bien"
"amigo"
"mejor amigo"
"personas que juntan sus lenguas y jdjdjxue"
En el otro extremo tenemos:
"me cae mal"
"me cae muy mal"
"detesto estar cerca de esa persona"
"te odio mucho"
"maldito, te voy a matar"
Como se imaginaran, las partes más extremas son los extremos del sube y baja. Al inicio todos partimos en la indiferencia, en el centro, donde esa persona nos cae ni bien mi mal. Y a medida que la conoces, te vas acercando a uno de los dos extremos, ya sea positivo o negativo. Obviamente el extremo negativo no es para nada saludable y espero ninguno este en ese puesto con nadie. Pero a veces el extremo positivo tampoco es el más saludable. Es por eso que muchas parejas deciden regresar al estado de "mejores amigos" o "amigos" o incluso de regreso al estado neutral. Aunque, si la relación o el periodo posterior a esta es muy turbulento y pasan cosas no muy agradables, pueden llegar a bajar tanto que acaben en el extremo opuesto al que estaban. Y no solo pasa en el extremo de parejas, sino en cualquiera de los lados en los que estés. Ya sea de mejores amigos a enemigos, amigos a no me caes bien, etc.
Creo que esperar algo de alguien que no quiere darte es uno de los principales motivos por los que muchas parejas o amistades colapsan bajo el peso de falsas esperanzas. Me imagino que tan molesto fue para Joaquín esperar que Laura le diera otra oportunidad y que eso jamás pasara, y lo molesto para Laura esperar a que Joaquín cambiara y siguiera estático en el mismo lugar. Las relaciones positivas dependen de que los dos puedan cambiar y ser influenciados por las dos partes hasta un punto saludable. Osea, yo he cambiado mucho gracias a mis amigos y estoy seguro de que ellos también lo han hecho gracias a mí (Aunque tampoco hay que exagerar, que después está el extremo donde una persona es extremadamente sumisa y hace todo lo que le dicen).
Sigo impresionado de lo rápido que pasaron de ser mejores amigos a personas que se odiaban mutuamente. Y llegué a una conclusión: ninguna relación es sagrada. No importa que tan firme sean los cimientos de una amistad: si esperas mucho de una persona, o esa persona de ti o ambas partes lo hacen, esos lazos se van a romper y acabaras en el lado contrario del sube y baja. Así que mi mayor consejo es: no sean tan cabeza duras.
Un saludo para Laura, que también es aspie y quizá haga otro blog hablando más cosas sobre ella.